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Botiquín es sinónimo de viaje. Si necesitas uno es porque te vas a algún sitio. Salir de la monotonía y desconectar al menos por un tiempo, siempre es positivo para cargar las pilas. No hace falta que te gastes todos tus ahorros para irte al lugar más exclusivo y paradisíaco. Seguro que todavía no conoces el pueblo de al lado y estamos convencidos de que tendrá un encanto especial. Una escapadita a la playa, a la montaña o a casa de tu amigo, también causará un buen efecto en ti. El viaje perfecto lo forman tres pilares: el destino, la compañía y la actitud.

Indispensable el botiquín para viajar

Para que tus vacaciones no se vean comprometidas por alguna “urgencia” médica a continuación te dejamos algunas pautas para que tengas un botiquín perfecto. Antes de nada y para ser prácticos, decirte que no hace falta que te lleves la caja entera de ibuprofeno, por ejemplo. Te puedes llevar un blister y con eso, sería suficiente. Si tomas medicación de forma crónica haz bien el cálculo de pastillas que vayas a necesitar y multiplícalo por dos. Has leído bien, más vale ser precavido y llevar pastillas de sobra. Son muchas las personas que vienen a la farmacia diciendo que están de viaje y se han olvidado la medicación en casa o que no tienen suficiente.

Empezamos con nuestro botiquín

Desinfectantes

¡Que levante la mano quién no se haya hecho una herida en el pie en verano! Las chanclas y el calzado de verano nos lo ponen bastante fácil. Nosotros somos más partidarios del Betadine o la Cristalmina que del alcohol. Para no llevarte botes grandes puedes optar por el Betadine en monodosis (botellitas pequeñas súper prácticas) o la Cristalmina que está disponible en formatos de 30 ml.

Gasas y apósitos

Olvídate del algodón para curar heridas. Se puede deshilachar y quedarse algún hilo dentro de la zona infectada. Las gasas estériles (importante este dato porque el algodón no viene estéril) sirven para curar rozaduras o para la limpieza de los ojos si tienes alguna conjuntivitis provocada por la piscina, entre otras cosas. No somos nada fans de las tiritas. Si no hay más remedio vale, pero si puedes elegir quédate con apósitos pequeños de gasa o de gel (los archifamosos Compeed y derivados). ¿Por qué? Las razones son muy sencillas, no se despegan con facilidad y duran más tiempo. Además los apósitos de gel aceleran la curación de la herida creando un microclima de hidratación que favorece el proceso de cicatrización.

Protector solar y repelente de mosquitos

Aunque esto corresponda más al bolso de playa que al botiquín, no está de más recordarlo. Tanto si vas a la montaña, a la ciudad o a la playa, el sol no perdona. Aunque asociemos el protector solar a la playa, si vas a hacer turismo urbano te debes proteger igual del sol. Tiene repercusiones nefastas para tu piel a corto, medio y largo plazo. El repelente de mosquitos es importante para evitar esas picaduras tan molestas.

Repelente de mosquito necesario en el botiquín

Repelente de mosquito necesario en el botiquín

Laxantes y antidiarreicos

Todos hemos experimentado cambios en nuestro cuerpo al salir de casa, cambiar los hábitos y las comidas. Se desregulan nuestros ciclos internos y tenemos dificultades para ir al baño. En momentos puntuales puedes recurrir a los supositorios (en 15 minutos hacen efecto y adiós al indeseado problema) o a comprimidos que actúan durante la noche y vas al servicio al día siguiente. ¿Y si te pasa justamente lo contrario? En vez de no ir al baño, te pasas la vida en él. Nuestro consejo es siempre dejarlo salir. Si algo te ha sentado mal, no es recomendable tomarse un antiadiarreico que haga tapón y lo mantenga dentro. Cuando tienes un viaje en coche, un vuelo y no queda más remedio, adelante. Si puedes evitarlo y dejar que todo salga, mejor. No sabemos si es una indigestión o una grastroenteritis producida por una bacteria.

Biodramina

Este medicamento es muy útil para los mareos. Si te ocurre en el coche, en el avión o en los barcos y todo te da vueltas, no lo pienses más, la Biodramina es tu solución. Actúa rápido y te quita el malestar producido por el movimiento muy pronto. Este compuesto te puede producir sueño. Por eso, existe la posibilidad de que lleve cafeína, para que no te duermas durante el viaje. No te va a activar demasiado, solo va a contrarrestar la somnolencia del antihistamínico. Para niños, existe la presentación en jarabe o en sobres monodosis, más cómodo para llevarlo de viaje. Analgésicos, antipiréticos y antiinflamatorios. O lo que es lo mismo: ibuprofeno. Si eres más partidario del paracetamol, recuerda que no es antiinflamatorio.

Seas alérgico o no, lleva contigo los antihistamínicos. Te sirven tanto si te ha picado una medusa o un mosquito y la reacción se ha complicado un poco. También pueden ser de utilidad para alguna alergia alimentaria. Esto es más difícil de identificar pero muy importante para que lo sepas y lo puedas utilizar llegado el momento.

Antiácidos

¡Llega el verano y nos excedemos demasiado con las comidas y bebidas! La mezcla entre grasa y alcohol es una bomba de relojería. Si la acidez puede contigo, ponle freno con un antiácido media hora después de comer.

Esperemos que no tengas que utilizar nada de este post pero como nunca se sabe… Más vale prevenir que curar. Cuéntanos qué te ha parecido, te esperamos.

Fuentes:

https://www.sura.com/blogs/calidad-de-vida/botiquin-primeros-auxilios.aspx
https://www.sura.com/blogs/calidad-de-vida/botiquin-primeros-auxilios.aspx
https://cuidateplus.marca.com/bienestar/2004/05/19/botiquin-viajes-3444.html

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